No olvide que dispone hasta final de año para hacer aportaciones a su plan de pensiones y así reducir el IRPF de 2020. Las cantidades aportadas minoran la base de dicho impuesto, por lo que el menor pago puede ser de hasta el 45% de los importes invertidos. A estos efectos, recuerde algunas situaciones que le ayudarán a optimizar ese menor pago de impuestos:
- Por ejemplo, puede ajustar las aportaciones en función de los ingresos anuales obtenidos. Una buena planificación de la cantidad aportada cada año le permitirá ahorrar más dinero que si realiza aportaciones iguales todos los años.
- Si su cónyuge no trabaja (u obtiene rentas bajas), puede realizar aportaciones a un fondo de pensiones a su nombre, y obtener así un ahorro adicional.
- También pueden obtenerse ahorros importantes según quién sea el beneficiario del plan en caso de fallecimiento. Si dicho beneficiario obtiene rentas bajas, su tributación será muy inferior a la que tendría un beneficiario con rentas más altas.
Planificar las aportaciones en función de las rentas, aportar al plan del cónyuge o elegir correctamente al beneficiario puede suponer ahorros importantes. Verificaremos si estas opciones son aplicables en su caso para que tome las mejores decisiones.