Si adquirió su vivienda antes de 2013 y disfruta de la deducción por adquisición de vivienda habitual, calcule las cantidades que ha satisfecho durante el año por los préstamos destinados a dicha compra. A la hora de realizar este cálculo, compute todas las cuotas del préstamo satisfechas (capital más intereses).
Si no llega a los 9.040 euros (que es el importe máximo anual que disfruta de deducción fiscal), realice una amortización anticipada antes de fin de año hasta alcanzar dicha cifra. De esta manera maximizará su deducción y podrá ahorrar en su IRPF el 15% de las cantidades totales satisfechas.
Al calcular las cantidades que dan derecho a deducción, no olvide incluir las primas que haya satisfecho a lo largo del año por los seguros de daños y de vida que el banco le haya obligado a contratar para concederle el préstamo hipotecario.
Consúltenos, nuestros profesionales le asesorarán sobre la cuantía del préstamo que debería amortizar anticipadamente para optimizar su IRPF.