Un cártel es un acuerdo entre operadores del mismo sector por el que renuncian a competir entre ellos y que suele afectar al precio de sus productos o servicios. Esta conducta puede denunciarse ante la autoridad de la competencia y las víctimas que se han visto obligadas a pagar un sobreprecio (ya sean personas físicas o jurídicas) pueden reclamar una indemnización por los perjuicios sufridos en el plazo de cinco años desde que se tuvo conocimiento o se pudo conocer esta práctica.
Lo habitual es que la víctima tenga conocimiento de la existencia de un cártel una vez éste haya sido constatado por la autoridad y los partícipes sancionados. Aunque no exista sanción, igualmente se podría reclamar contra quienes lleven a cabo estas prácticas; sin embargo, al no existir una resolución sancionadora, será más difícil demostrar la existencia del cártel.
Todos los coinfractores son responsables solidarios, lo que en teoría implica que se puede reclamar contra cualquiera de ellos. Ahora bien, la existencia de un cártel no conlleva inmediatamente un derecho de indemnización, sino que será usted quien deberá demostrar que la actuación de su proveedor le ha causado un perjuicio real.
Asimismo, deberá demostrar:
En estos casos es clave aportar un peritaje que valore los daños sufridos atendiendo a criterios razonables. Si no es posible cuantificarlos o el informe no es concluyente, el tribunal podrá estimar el importe a indemnizar.
Nuestros asesores estudiarán su caso y le informarán sobre cómo reclamar el sobrecoste que haya tenido que pagar si es víctima de un cártel.